¿En qué consiste los trastornos alimentarios?

Se define a los trastornos alimentarios, también conocidos como psicopatología alimentaria, como un grupo de patologías que llevan al que las padece a una inmersión en la obsesión por su aspecto físico en general, y, en particular, por su peso, su cuerpo y por los alimentos que ingiere.   No puede citarse con seguridad unas causas estipuladas, pero se cree que la mayor influencia proviene de nuestra propia sociedad, una sociedad en la que sólo la extrema delgadez se encuentra relacionada con el éxito, mientras el resto de población queda “relegada” . Esto unido a una conducta perfeccionista, altas expectativas  y una baja autoestima llevaría a una impotencia que desencadenaría alguno de estos trastornos .  Es alarmante la rapidez con la que este problema aparece en la población, siendo el máximo exponente entre los 12 y los 25 años (aunque puede aparecer a cualquier edad).  Aunque generalmente se relaciona a esta ansiedad y estos trastornos con las mujeres, en la actualidad muchos hombres lo sufren, con el fin de tener un mejor cuerpo. Además suele aparecer acompañado del exceso de ejercicio, que conlleva a la vigorexia, al dejar de alimentarse sanamente y recurrir a los esteroides y proteínas sintéticas.
Los problemas de la conducta alimentaria son un problema muchísimo más serio de lo que la sociedad piensa, puesto que se caracterizan por el cansancio excesivo/sueño, un notable aislamiento de la persona, conductas violentas, irritabilidad y agresión hacia miembros de la familia y persona conocidas o, incluso autoagresión al no aceptarse, culpa y depresión. Además, no sólo afectan al nivel psíquico, laboral o social de una persona, si no que tienen una peligrosa incidencia a nivel físico,  pudiendo desencadenar graves problemas como efectos adversos en corazón,  sistema digestivo (también dientes y boca) o osteoporosis, anemia enfermedades relacionadas con el hígado o los riñones, e incluso hacer peligrar la vida de la persona. Hasta tal punto es decisiva la nutrición para nuestro cuerpo que, en el peor de los casos, la malnutrición por estos trastornos podría afectar a funciones cerebrales.

Los ejemplos que vamos a tratar sobre la psicopatología alimentaria son: 

-          Bulimia:  es una enfermedad caracterizada porque la persona come en exceso o sufre episodios de ingestión excesiva de alimentos y siente una “pérdida de control” y un agravado sentido de culpa que le lleva a la eliminación casi instantánea de lo que acaba de ingerir, utilizando métodos como el vómito o el uso de laxantes.
-          Anorexia: trastorno que se caracteriza por la incapacidad para poseer un peso corporal mínimo considerado normal en función de las características de la persona. Las personas que la padecen recurren a ejercicio excesivo o dietas extremas con tal de bajar de peso.
-          Ortorexia: en esta enfermedad el problema gira en torno a la calidad de la comida, no a la cantidad como los dos anteriores.  Es decir, se entiende como una obsesión por la comida sana, biológicamente pura.  Esta obsesión puede convertirse en un trastorno obsesivo-compulsivo.
-          Permarexia: consiste en una obsesión por el “miedo” a la comida y a lo que creen que son sus efectos, es decir, engordar, que mantiene a la persona en una ejecución de dietas constantes.